Crìticas de pelìculas

lunes, noviembre 14, 2005

ASOKA


MAGNIFICA. Una película histórico épica

Una película llena de acción, romance, odios, batallas y una historia que no olvidarás jamás. Una muestra del excelente cine de la INDIA.

Asoka fue un emperador que pasó de ser un sanguinario guerrero y gobernante a abrazar el Budismo y difundirlo por toda la India.
La película comienza con Asoka de niño, presenciando la abdicación al trono de su abuelo, que se marcha para ser monje jainista; Asoka se queda con su espada, que años más tarde usará en las batallas contra otros pueblos enemigos de Magadha. Uno de los hermanos de Asoka, Susima, habrá de ser el sucesor del trono por deseo del actual rey y padre, y por apoyo de todos sus hermanos.
Pero Asoka, también hijo del rey, aunque de diferente madre que Susima, es otro posible candidato al trono, y además sus dotes como estratega y guerrero, le hacen sumar puntos.
Por ello, Susima intenta por todos los medios quitárselo de en medio contratando asesinos, que siempre fracasan.
Tras una confrontación con sus hermanos, la madre de Asoka le pide que abandone el reino y que inicie una vida lejos como una persona normal.
A su pesar, él acepta, solo para que su madre rompa un voto de silencio que había iniciado por él. Así se inicia el viaje del protagonista, que ahora se hace llamar Pawan, que lo lleva a conocer en una de sus paradas a una hermosa joven de la que se enamora.
Ésta resulta ser Kaurwaki, princesa de Kalinga, que viaja de incógnito con su hermano pequeño y heredero al trono, Arya, y el capitán del ejército de su reino, Bheema, de regreso al hogar para que el niño acceda al trono, esquivando todas las tentativas de asesinato contra ellos.
Asoka se les une, y acaba casándose con Kaurwaki en secreto.


Un mensaje llega de Magadha para que Asoka vuelva, ya que su madre está enferma.
Asoka se marcha con la promesa de volver con Kaurwaki en dos días.
De vuelta a su reino, el monarca le pide que se una al ejército. Asoka vuelve donde dejó a su amada y al joven heredero, pero el lugar ha sido destruido, y Bheema le miente diciéndole que ella y el pequeño han muerto.

Deshecho por las noticias, y sin miedo a la muerte regresa a casa para luchar o morir en el ejército. Por otra parte, Kaurwaki no deja de preguntar por él en todos los pueblos por los que pasaban, sin saber que él la ha tomado por muerta.

En una batalla resulta gravemente herido, y es acogido en un monasterio budista, donde es atendido por las mujeres de allí. Mientras, en el reino, siguen las intrigas para su asesinato, pues cada victoria como guerrero suponen un paso más al trono. Es enviado un asesino al monasterio, que se disfraza de mujer para entrar y envenenarlo, pero una de chicas que más pendiente estaba de Asoka, Devi, lo descubre el día que ella se va a casar, y al intentar proteger a Asoka acaba matando al asesino. El novio y la que iba a ser su familia política la repudian, y Asoka decide casarse con ella, y pronto ella se queda embarazada.

Un final crudo y sorprendente.